viernes, 13 de noviembre de 2020

Tormenta tropical Eta: Cambio Climático en Guatemala y Amenazas Naturales

 

Tormenta Tropical ETA: Efectos de Cambio Climático en Guatemala.

La primer semana de Noviembre del año 2020 trajo a Guatemala una nueva amenaza natural: Tormenta Tropical Eta, nombre que recibió el 1 de Noviembre y que cinco días después azotó Guatemala, principalmente en orden de vulnerabilidad los departamentos de Guatemala, Izabal, Zacapa, Petén y Quiché.  El primer punto de choque en costas de Nicaragua predispuso el nivel de magnitud, además, no se esperó que decenas de comunidades urbanas y rurales queden aún inundadas.

No se recibió de la población advertencia directa para el desalojo de casas, el sistema de protección civil de CONRED no actuó, no se dieron a conocer boletines en los medios del INSIVUMEH, órgano científico asesor del gobierno de Guatemala.  Parece que las lecciones de Huracanes y Tormentas anteriores aún no sirven para proyectar protección adecuados: pérdida de vidas (más de 40 oficiales al momento) y millones de dólares en cultivos y ganadería.

El gobierno debe reforzar líneas de acción específicas para el monitoreo de amenazas naturales, principalmente en Cambio Climático y así disponer de herramientas para reducir el la vulnerabilidad de poblaciones y biodiversidad.

A lo anterior se suma la falta de planes de ordenamiento territorial que inciden en que poblaciones estén asentadas en zonas de riesgo.

Una semana después decenas de comunidades urbanas y rurales siguen inundadas, la geología kárstica de la región es un elemento que impide que las dolinas drenen adecuadamente el agua de precipitaciones.  

Sensores Remotos

De manera preliminar, el análisis con imágenes Sentinel 2A de fecha 10 de Noviembre 2020 permite con la combinación de bandas, de lo cual a través de color natural e infrarrojo se muestra áreas que aún continúan inundada.

Las áreas corresponden a la cabecera municipal Cobán, San Pedro Carchá, San Juan Chamelco, Aldea Campur (pertenece a San Pedro Carchá).









jueves, 28 de julio de 2016

Estudio de riesgo, Castillo San Felipe de Lara

El Castillo San Felipe de Lara se localiza en Fronteras Río Dulce, Guatemala.  Desde hace 6 años se realizan estudios técnicos para remodelar el complejo arquitectónico y sobretodo el Castillo.  Se localiza en el Parque Nacional Río Dulce, un área protegida con abundante biodiversidad.

Es una zona de amenazas naturales, principalmente, deslizamientos e inundaciones.  Por tal razón, la realización del estudio de riesgo se requiere a nivel institucional para garantizar a largo plazo la inversión y sobretodo, la seguridad de trabajadores y visitantes.

Se revisó la documentación previa relacionada a amenazas, que incluye: datos climáticos, imágenes satelitales Landsat 8, geología, tectónica y sísmica.

Otro aspecto importante fue la generación del modelo hídrico, principalmente, precipitaciones y la relación con cambio climático.

Esto da como resultado que la principal amenaza corresponde a inundaciones, lo cual sucede cada año durante la época de lluvias; así también, el oleaje del lago de Izabal ocasiona la erosión de la playa de bañistas.  Seguidamente, la zona de falla Polochic-Motagua tiene un desplazamiento anual en milímetros, de esto, el terremoto de 1976 cuyo epicentro fue en Gualán, afectó considerablemente la región.

Este sitio turístico tiene una extensión de 18 manzanas.  La remodelación trae consigo beneficios sociales, la población de San Felipe de Lara y Río Dulce depende en gran parte del turismo.  El INGUAT (Instituto Guatemalteco de Turismo) tiene la perspectiva de aumentar el número de visitantes.

Los impactos son mitigables y con ello lograr el funcionamiento adecuado del Castillo San Felipe de Lara.  Esta es una muestra de la importancia de estudio geológico de beneficio a comunidades de Guatemala.